Buenos días. Mi nombre, mi edad, mis circunstancias no importan. Sólo importa que soy opositora crónica desde hace cuatro años. No soy la primera opositora que inicia un blog; anoche, cuando se me ocurrió la idea, me dediqué a indagar si había otros blogs de temáticas parecidas y… vaya si los hay, es difícil ser original en este terreno. ¿Qué puede aportar mi blog de novedoso? Pues que no trata de cómo ser opositor y estudiar eficazmente hasta lograr ser funcionario en un tiempo asumible, ni de cómo ser opositor y tener vida familiar, afectiva y sexual, ni de cómo ser opositor y lucir al menos un cutis saludable y un peso que entre dentro de la normalidad. No. Mi blog no será un espacio a las ideas constructivas que ayuden a sobrellevar mi propia vida y la de los demás. Ni sé sobrellevar mi propia vida ni sé asistir a los demás, así que me ahorro la vanidad de dar consejos a quien se encuentra exactamente igual que yo. Mi iniciativa es mucho más española: quiero hacer un blog para quejarme. Y como soy un animalito social, me apetece brindar a mi público la oportunidad de quejarse. Como soy la única que puede publicar entradas en este blog, compartiré con vostros el siguiente correo electrónico: ayermateafobos@hotmail.com. Espero recibir todas vuestras experiencias feas y deprimentes relacionadas con la oposición para que así, a modo de terapia de grupo, tengamos todos la feliz oportunidad de cagarnos en sus muertos – ya sabéis en los de quienes-. Los mensajes optimistas, constructivos o defensores del sistema no serán publicados. Motivo: soy la dictadora de mi espacio y en él publico lo que me sale de los empeines.
Aprovecho la ocasión para lanzar otra propuesta: recopilar firmas para abolir el sistema de oposición o, en su defecto, modificarlo hasta las trancas. En breve – este blog está en fase de cocción- os presentaré esta idea con más detalle.
¡Saludos!
¡Abajo las oposiciones! 
Jajajajajaja, nena que bueno! creo que esto me ha dado para reirme pa to el día! jajajajaja…..la que vamos a liar!
¡Gracias por ser la primera en estrenarme el espacio, chica! Espero tu testimonio 😀
Pues si ke es verdad ke las oposiciones despues de tanto tiempo estudiando y estoy ablando de años incluso, sacrificando tiempo de tu vida, ni sikiera te ofrezcan alguna otra solucion despues de suspender,pero weno la vida siempre es injusta asin ke kien pueda ke la disfrute 😉
La «solución» es parte del problema: presentarse otra vez en un año… o en dos años, muchas oposiciones son cada dos años. Incluso, tengo entendido, las hay que no son fijas y pueden salir o no, según les dé el Siroco a los gobernantes…
Cuando suspendí por primera vez me quedé solita, desesperada y sin opciones. Me tiré hacia la empresa privada, lo que me hizo darme cuenta de que algunos empresarios son rastreros y peseteros (¿cómo se dice con el euro?¿eureros?). Y al fin, después de un tiempo, esa convocatoria y el no aguantar a la maldita jefa de ventas volvieron a hacerme entrar ganas de estudiar (vamos, es un decir, porque dos años estudiando cada día sin parar no es mucho de apetecer).
El caso es que dije «a por ello». Y ahí me puse. Día tras día me iba dejando la vida en aquella habitación rodeada de papeles. Día tras día me iba consumiendo en la oscura red de la oposición. Pero al llegar el momento decisivo me dije «allá voy; yo puedo más que tú».
No me lo puso fácil, lo he de reconocer. Pero yo llevaba tan buenas armas, mis conocimientos, mi seguridad y mis ganas de vencer, que lo conseguí.
Sí, vencí a la terrible oposición. Y lo hice dos veces, como aquellos amantes que se ven por primera vez y se aman con ganas. Lo que pasa es que no disfruté tanto… hasta el clímax, hasta el momento en que me vi en la lista y dije «sí» (no es un orgasmo, es que había aprobado).
Una pregunta, Coral… ¿En tus oposiciones basta con aprobar? Es que eso no es así en todas 🙂 de hecho, en las mías puedes aprobar, puedes verte con un 8 o un 9, que si no te llaman, no tienes plaza, puntos ni derechos.
Algo que ya he comentado ahí es que tengo más información de las de educación por ser las mías, pero tela que rascar hay en todas, y no dudo que de tu oposición – y en cualquier oposición- también habrá cosas que merezcan ser contadas – y quiero contarlas, este blog no trata de «oposiciones de educación» sino de todas las oposiciones-. También entiendo que pretendes animar, decir que salir adelante es posible… pero no me vendas que son justas, porque no lo son, y a veces no basta con lo que hagas… si la coyuntura viene atravesada, tu esfuerzo no vale un pimiento.
Yo vengo con los brazos abierto para darte un gran abrazo y felicitarte por tus proyectos, tu alegrìa y ese alma de castañuela que nunca mueres. Besos grandes por este lado del mundo, para ti…. Muases.
¡Besotes Freya! ¿Cómo andas? Me alegra mucho verte por aquí 🙂