Hay enigmas que nos han entretenido durante generaciones… ¿Por qué el pollo cruzó la carretera? ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina? ¿Por qué Espinete vivía desnudo y, para dormir, se ponía el pijama? ¿Cómo es posible que Zenón, por más que avanzara, nunca llegaba a la meta?…
Hoy he descubierto la aparición de un nuevo enigma que nos tendrá entretenidos y que se suma a estos clásicos: la aparición de la cofradía de los opositores cocodrilo. Se trata de gente que, tras muchos años estudiando (y una dentadura divina y envidiable) un día siente molestas y decide ir al dentista, descubriendo allí que sus encías albergan dientes y más dientes supernumerarios que acabarán abriéndose camino para ver la luz, aunque destrocen a los otros dientes que les compliquen el paso.
El quid es que fui al dentista para que me pusiera un empaste que se me cayó y… acabaré en cirujía, tengo tres suplentes de esos, uno de ellos fuera y dos locos por salir y pegar un bocado a las yugulares de algún tribunal… y seguro que somos más, cada vez más… ¡y con nuestros dientes conquistaremos el mundo!
Mientras esta nueva especie mutante comienza a ver la luz, en la red se detona una Guerra Mundial. Los actuales cambios en el correo electrónico nos impiden, para siempre, aparecer como «desconectados» ante nuestros amigos, así que seremos testigos de reapariciones marianas, violentos bloqueos (único medio de que no se nos vea) y, a la postre, conflictos armados.
Hay secretos que deben seguir siendo secretos. Nuestros ratos de conexión a hurtadillas son un claro ejemplo.
¡Saludos!
Notas:
1. Sobre dientes supernumerarios: http://archivo.elnuevodiario.com.ni/1999/julio/02-julio-1999/variedades/variedades1.html
2. Sobre otros supernumerarios: http://es.wikipedia.org/wiki/Supernumerario_%28Opus_Dei%29
3. Y, por último, una canción sobre «El ataque de las chicas cocodrilo».. esas no opositaban, pero fueron las pioneras:
¡Abajo las oposiciones! 