1. Hice los deberes y calculé mis horas trabajadas. Llevo aproximadamente 25 horas, aunque propiamente lectivas sean 18.
2. Ayer no di clase. Razones familiares lo impidieron. Parece que mi próxima clase es el martes de la semana que viene, pero luego habrá dos días en los que no podré dar clase porque están ocupadas las instalaciones (por montar y demsmontar la Cruz de Mayo).
Nota:Por suerte, la técnico y el mediador sí que fueron a dar la información prometida. A tal fin, les dejé las llaves del aula. Quien lee mi blog sabe que estamos dando una imagen de informalidad atroz.
3. El viernes de la semana siguiente habrá una comida social. Será una buena oportunidad de conocer voluntarios y ver qué se cuentan porque, la verdad, sólo he conocido a aquellos que me han hecho alguna vez de taxistas.
4. Próximamente hay una carrera solidaria, pero ni me voy a poner a correr ni me apetece poner poster o colocar pegatinas. Creo en otro tipo de cosas más efectivas y estoy en un momento en el que no tengo tiempo para perder.
Así que estos son los asuntos sobre los que hablaré próximamente: la siguiente clase y la comida con los voluntarios.
Y ahora voy a salvar la patria con una importante acción. Fregar los platos.