Como ya sabéis, hoy ha sido mi tercer día deambulando por la empresa, el segundo llamando a la gente y el primero con contrato (aunque sean una mierda, siempre emociona un poquito firmarlos ¿verdad?).
A continuación, mi resumen del día:
- Como os contaba, hoy me tocó comer mientras iba galopando al trabajo. La compi me hizo el bocata. No me dio tiempo ni a comprar agua. Imaginad lo que es correr por la calle a pleno sol, mordiendo un bocata de mortadela hecho con pan algo endurecido de ayer, sin agua y, además, hablando a la vez, pues hemos salido charlatanas las dos. Francamente, no sé cómo me he asfixiado. Tampoco sé cómo he soportado una conversación que ha versado sobre el complejo de falta de estatura que tiene mi compi, que mide 1.70 y no hay quien la descabalgue de los tacones. Su excusa es que en su familia son más altos y su argumentación es que dejó de crecer en el momento en el que perdió la virginidad (a los 15). De qué cosas se entera una, caramba. Chicas, chicas, cruzad las piernicas que, si no las cruzáis, os encanijáis.
- Hoy vimos a salir a nuestro compañero, el del turno de mañana que se iba a rajar. Parece que al final no se ha rajado. El reto que le soltó la padawan de «no te quedas porque no tiene cojones» ha funcionado. Con los chicos siempre funciona eso de referenciar a los cojones.
- FACTOR SILVIA: las máquinas me odian. El ordenador que me tocó utilizar me saboteaba de tal modo que la coordinadora me instó cambiar de ordenador. Lo más gracioso es que cuando cambié de ordenador y me metí en otro que supuestamente iba bien, empezó a fallarme también. La cosa es que yo ya voy con mi guión en papel, pues sé perfectamente cómo se las gastan los ELECTRODUENDES conmigo, pero hay un momento en que es imprescindible hacer la consulta informática: cuando vemos qué cobertura posible de internet tiene el cliente. ¿Recordáis que cuando silenciamos el micrófono no tenemos música y, o bien nos quedamos en silencio absoluto, o bien intentamos entretener al cliente para que no cuelgue y no se cuelgue? Hoy se me han dado unos silencios tan enormes por culpa de las inconveniencias técnicas que les acababa diciendo lo que ayer ya venía comentando aquí: «Usted perdone, no me he ido, sigo haciendo la consulta pero a veces los ordenadores hacen de las suyas y aquí no tenemos musiquita en los micrófonos: si quiere usted le canto, pero no creo que le guste». Lo bueno es que la gente tiene humor y cuando les digo esto se suelen reír. En algo se me tenía que notar la gracia andaluza, en el acento ya sabéis que no.
- Hoy he sufrido el acoso telefónico de los viejos más peligrosos de Coruña. Recordaréis que mi ordenador marca solo. Pues bien, hoy solito pilló fijación con los prefijos 981, así que entiendo que realmente era mi ordenador el que acosaba a los viejos coruñenses, pero ¡chicos! ¡qué mala follá que tienen y qué poco se les entiende! cada vez que abren la boca hay que preguntar cuarenta veces qué han dicho, porque tienen uno de los acentos más cerrados que me he encontrado en la vida; además, todos tienen una gran autocompasión y no quieren comprar, escuchar tampoco, lo que quieren es contarte todos los achaques que tienen y cómo le molesta que les llames. Si ayer, llamando de manera más equilibrada a toda España, ,me cayó una bronca, hoy me habrán caído tranquilamente como siete broncas. Salí con ganas de exterminarlos a todos, comenzando por Fraga.
- Sin embargo, hoy la que ha logrado exasperarme de verdad ha sido una señora de mediana edad que me ha tenido más de media hora explicándole una y otra vez la oferta, mareándome con preguntas imposibles para una tía de letras en su segundo día de trabajo, haciendo cálculos conmigo (me la imaginaba con orejas de gnomo, un ábaco en la mano y varias fórmulas de trigonometría, probando) y cuando parecía que iba a cerrar la ficha (es decir, que me iba ac comprar) de pronto me sale con un «Lo siento, no me interesa». Hija de su puta madre, tan loca me ha dejado que eran las 4 de la tarde, me quedaban dos horas, y yo andaba convencida de que eran las 6 y ya tocaba recoger. ¡AAAH!
- En cuanto a situaciones escatológicas vividas en estos dos días, después de que hemos llamado a varias empresas, un consulado, a la comisaría de Vigo, a varias asociaciones y a los viejos moribundos, el premio lo ha obtenido hoy, nuevamente, la padawan (yo atraigo los desastres, ella las llamadas raras) porque le ha atendido un chaval en pleno coito interruptus, en otras palabras, que andaba dándole al fuelle. Eso de estar dándole al fuelle y dejarlo para atender una llamada de propaganda es como para… en fin, si fuera mi pareja, le mataría XD.
- Mi TOP respuesta borde recibida ha sido la de: «¿Con quién tengo el gusto de hablar?» «Con mi polla». ¡Qué bien adiestrada la tiene!».
- Un detallito que me ha sorprendido: a la compi que entró nueva conmigo el otro día le han dado permiso para hacer una llamada desde su casa y cerrar así una ficha. Así que daos cuenta de cómo está el tema, que si se nos antoja nos podemos traer el curro a casa si queremos. A mí no se me hubiera ocurrido preguntarlo, daba por supuesto QUE NO.
- Seguí preguntando a otras compañeras por su antigüedad. Baste decir que una llevaba su tercer contrato mercantil, es decir, que ya lleva 45 días de comisionista, intentando llegar a los mínimos. Creo que por esto eran las protestas que vi en Internet: si tú te empeñas en trabajar para ellos con la esperanza remota de alcanzar un día los objetivos, ellos te dejan tranquilamente hasta que los consigas o hasta que te canses. Yo no creo que tenga tanta paciencia, veremos a ver.
- Por si no se ha notado, hoy no vendí un «carallo» o como se escriba. Bastante he hecho con sobrevivir.
El lunes más. Una pasa de currar el fin en su tiempo libre y, además, mañana tengo una boda. No creo que escriba hasta el sábado, incluso puede que no escriba hasta el lunes, pero este mes tengo el record singular de haber escrito más entradas que días tiene el mes; creo que eso no lo había logrado nunca hasta ese momento. Tanto escribir no puede ser bueno, pero hay vicios más malos en el mundo.
Y ahora, el video que ha estado bailabando todo el rato en mi mente para intentar motivarme en este día agobiante. ¡A disfrutarlo!
La señora esa de mediana edad es del estilo de mi Señora; mujer de incontables virtudes a la que el destino me unió para felicidad eterna y gozo sublime, pero al menos demuestra prestar atención. :))
Jajajaja… pero poneos en el lugar del teleoperador!! XD es una vida dura, sufrimos mucho!! jaja 😀 Un abrazo, Vicente. ¿Resolviste tu problema con tu muro de Facebook?
Yo creo que si quieres durar en un trabajo así, es imprescindible que te impermeabilices contra borderías, malas respuestas, y pérdidas de tiempo. Si no, acabarás quemada antes de que pasen las dos semanas (que en realidad son 10 días). ¡Me encanta la respuesta borde!
Ya me voy impermeabilizando, pero necesito un plus, ese que supone la diferencia entre vender o no. Pásate por la entrada de hoy, anque he visto que te has tenido que poner al día a todo meter, han aparecido cuatro respuestas tuyas de golpe, ¡je!
Es que como no he tenido ración diaria de Silvia, pues me he conformado con ponerme al día del blog. 😛
No tienes mal conformar XD